-La cosa va de parejas, anímate y ven, no es una fiesta, solo es una reunión de revelación, dijo Marce.
-¿Revelación?.
-¿Revelación?.
-¡Sí!, revelación; ya te enteras cuando vengas ¡acompañada de algún masculino!. Lunes a las cuatro; y Maia, no vengas comida. Se escuchó una sonora carcajada, no seguí el juego y colgué.
Lunes al medio día, había parado a comer mi primer bocado del día, eran alrededor de las dos y seguía indecisa en ir donde Marce. Conociendo sus gustos extravagantes; y recordando la última vez que había ofrecido a sus invitados sushi y sashimi servido en cuerpos femenino (nyotaimoro) y masculino (nantaimori), esto, para evitar críticas como hacer pasar a la mujer como objeto de diversión, así, (según dijo), la balanza estaba nivelada, preferí comer algo antes de presentarme en su casa.
Al llegar, me extrañó verlo todo de lo más normal, sin sorpresas ni excentricidades. Llegué acompañada de un amigo de la infancia, dentro del grupo era el de más edad, no cabe duda que a los hombres (muchos de ellos, la mayoría de ellos, todos ellos) les asienta la madurez, Marce se acercó y se unió a la conversación, traía en su mano derecha un vaso, hielos y agua, en la otra una botella de Rioja e iba rellenando las copas vacías. Toqué su mano... ¡Marce...!, todo quedó claro, sonreímos y nos abrazamos. Llegado el momento, el pastel venía en su interior con un precioso color rosado...
Manolo paseaba despacio alrededor nuestro, se paró frente a nosotros, elevó su copa, inclinó ligeramente su cabeza sin dejar de mirarme y esbozó una sonrisa...
¡Jo!, no pude evitar recordar lo bien que se estaba a su lado...
¿la buena noticia es que estaba manolo?
ResponderBorrarNo, nada de eso. Que Marce está embarazada y es niña.
Borrar¡Ah! ¡qué bien!
BorrarSí, DRACO.
Borrarasí me gusta, que seas políticamente incorrecta.
ResponderBorrarhasta tu comentario pensaba que Marce era chico, y aún dudo.
¿ una chica organizo eso de los japoneses?
abrazoo
En estos tiempos y a estas alturas, cómo no serlo, Gabiliante. Marcela es mujer; y sí, organiza cosas fuera de lo común. Otro para ti.
BorrarQué bien lo describes, Maia. Genial.
ResponderBorrarLa casualidad es algo más cuando se trata de ... (en tu caso) de Manolo.
Magnífico.
Yo soy amiga de Marce y Manolo del marido de ella, así que, en reuniones es seguro que nos encontremos.
BorrarEl pastel parece apetitoso.
ResponderBorrarBesos.
Tenía buen sabor, aunque casi nadie lo probó por estar celebrando el felíz acontecimiento, TORO.
BorrarFelicidades para Marce, en esta ocasión el "sushi corporal" no correspondía, aunque la presencia de Manolo es curiosa cuando se trata de amigas, salvo se quiera que ambos se reencuentren. Aunque muchas entradas atrás yo lo anuncié. Jo! Me quedo con el blues y un trozo de pastel rosa, si queda.
ResponderBorrarBesos dulces Maia.
No es tan curioso si recordamos que es amigo del marido de Marce. ¿Qué anunciaste?, ¿Un reencuentro! Eso seguirá sucediendo, tenemos amigos en común. La música la escuchaba anoche, DUICE.
BorrarNo hay que desatender la perpetuidad de la especie. La fiesta debe continuar.:)
ResponderBorrarNo podemos permitirlo, Cabrónidas.
BorrarYo también hubiese ido comido y sin bromas, literalmente, eso de que me sirvan el sushi encima de un cuerpo desconocido no me va. El sexo y la comida en mi caso no funcionan juntos pero que cada cual lo disfrute como quiera.
ResponderBorrarLa cercanía de alguien con quien se estaba bien y recordar justo eso es como si se hubiese quedado un cabo suelto. Los ex a veces, parecen eso, cabos sueltos no resueltos.
Hay ciertos límites; y para mí uno de ellos don los extraños. Pienso que continuar cruzándote con tu ex no termina de dar el cierre.
Borrar"...a los hombres (muchos de ellos, la mayoría de ellos, todos ellos) les sienta la madurez": ¿les sienta o les asienta? No sé.
ResponderBorrarGracias por hacerme notar el error, Fackel; ya está corregido.
BorrarPues no he dicho eso por señalar error alguno, sino porque ambos verbos podrían aplicarse y quería salir de la duda. Podía ser: les siente bien o mal la madurez. O: los hombres se asientan, como parece ser el caso. Pero ¿crees de verdad que se asientan? Por cierto, asentar es también poner a alguien o algo en una silla, por ejemplo. Y eso es lo que pasa a muchos hombres a ciertas edades. Quien dice silla, dice sofá o tumbona. (Disculpa por tanta digresión)
BorrarCuando lo leí antes de publicarlo pensé, falta una palabra "bien", me distraje y lo dejé pasar, luego que regresé a responder comentarios volví a notarlo; y ahora sí fue a voluntad dejarlo pasar, me dije, se entiende, disculpa, no quería confundirte.
BorrarMe gusta la palabra "tumbona".
Enhorabuena a tu amiga, una nueva vida siempre es ilusionante. Coincidir con Manolo irá siendo un buen termómetro de tus sentimientos. Cuando la indiferencia sea lo predominante Manolo habrá pasado a ser parte del paisa(na)je común en que te desenvuelves. Imagino que eso ocurrirá cuando encuentres a otra persona más interesante que él con quien quieras recorrer el camino juntos
ResponderBorrarGracias, Joaquín. Ya va quedando atrás Manolo.
BorrarReconozco que los comentarios me facilitaron la comprensión de tu texto. No siempre son buen lector.
ResponderBorrarMarcela es fuera de lo común, por lo que contás y por todo lo que has contado.
Besos.
No todo lo dejo claro, Demiurgo. Marcela es especial, tallada a mano. Otro para ti.
Borrar