miércoles, 4 de octubre de 2023

JM

— ¿Fue suficiente, Maia?
No esperó que hubiera una respuesta, continuó como en una reflexión en tono alto, ¿acaso un monólogo?, — ¿cuánto tiempo más piensas dedicarle?, hice una señal al mesero, levanté un poco el vaso y lo moví en péndulo con suavidad, él llegó de inmediato con un whisky en las rocas, el cual agradecí con una ligera sonrisa, lo moví  ligeramente, el sonido de los hielos chocando entre sí me dejaba una sensación agradable — No permitas que manipule tu vida, Maia, no vuelvas a ese bucle de toxicidad del que no podías salir; ya han pasado ¿qué, doce años?, eres más que eso, querida amiga

—No lo haré, es solo que, aquel fue mi peor pesadilla, por eso cuando conocí a Manolo fue un soplo distinto a lo que había vivido; y no es que esté considerado su propuesta de volver, es solo que sigo sin comprender qué pasa por su  cabeza, Sara. 

— Son hombres, Maia, ¿Qué otra explicación necesitas?, agrégale que aquel es bastante machista y carece de empatía, céntrate en, ¿Cómo dices que se llama?.

— JM

— Sí, es cierto JM; ¿Y dónde dices que lo conociste?

— Amistades en común 

— Pues ahí lo tienes, solo no cierres los ojos, recuerda que acostumbran darnos sorpresitas... Se interrumpió y se quedó pensando, algo le preocupaba y estaba a punto de soltarlo — ... y Maia... 

Hubo un silencio incómodo, Sara estaba buscando las palabras para hablarme de lo que parecía inquietarla. La conozco tan bien que no eran necesarias, la interrumpí de inmediato, intuía lo que me diría.

— No lo digas, Sarita, esa no eres tú. 
Se encogió de hombros, hizo una mueca con los labios y lo soltó a bocajarro

— He decidido complacer a Sergio. Me casaré este invierno; y Maia, quiero que seas mi testigo...

23 comentarios:

  1. Nada más ver el título se me revolvió el estómago :) Mejor me quedo con el anuncio de Sara, la despedida de soltera será un acontecimiento, no lo dudo.

    Besos dulces Maia.

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. ¿Y eso, te vino el recuerdo de un amor complejo?. Sí, seguro que la despedida será inolvidable, DUICE.

      Borrar
    2. No, recuerdos de alguien detestable. Pero vine a dejarte besos dulces esta noche.

      Borrar
  2. Estamos invitados?? Digo a la despedida, me apetece un montón. Abrazo

    ResponderBorrar
  3. los ex son como la niebla, siempre están ahí para joder un bonito día.

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Sí, aunque me gusta la niebla, DRACO, pero sí, arruinan un bonito día.

      Borrar
  4. Una historia tan próxima entre la razón y el desespero. Un abrazo
    Carlos

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Así como lo has mencionado, Carlos. Otro para ti.

      Borrar
  5. Ya veo que vas de boda.
    Abrazos Maia.

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Como invitada, Ernesto; yo con las bodas, paso. Otro para ti.

      Borrar
  6. Serás testigo también de la ruptura; lo presiento.

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Hemos presentido lo mismo, Cabrónidas, ojalá que no.

      Borrar
  7. Pues estaba pensando en las sorpresitas que dices que damos los hombres(con lo predecibles que somos). Y en la imposibilidad de entendernos(con lo básicos que somos). Cuando me encuentro que se casa. Eso sí me parece sorprendente con lo que tenía leído hasta ahora. Y te aseguro que estoy atrapado y de pronto necesito saber en qué queda esto. Aunque imagino que requerirá un tiempo. Saludos

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Considero que eso sucede cuando bajamos la guardia, Sergio. También fue una sorpresa para mí, no que lo estuviera pensando porque eso lo intuía, la decisión tomada, será para noviembre o diciembre. Saludos

      Borrar
  8. Esa intimidad que manejan tus relatos los hace tan interesantes como aleccionadores y hoy, como, terminando siempre en lo alto. ¡Menuda propuesta! bueno, son dos, casarse y pedirte ser testigo.
    Feliz jueves, Maia.

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Eso pasa porque he abierto las puertas de casa, Enrique; y son mis invitados. Sí, esa niña muerde amplio. Feliz jueves.

      Borrar
  9. Eso no lo esperaba.
    Parece que el tal Sergio insistió con su terquedad. Y tu amiga Sara aceptó.
    Ya lo han comentado antes, ha pasado que una pareja está durante años sin casarse. Y luego de hacerlo, se separan al poco tiempo. Tal vez sea cierto, lo que comentan, que tal vez te toque también el ser testigo de la separación.

    Besos.

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Lo vengo pensando, Demiurgo; y espero que no. Otro para ti.

      Borrar
  10. Qué importantes son los soplos diferentes, sobre todo si son oxigenantes, respestuosos, aportadores y no te digo si revitalizan pasiones dormidas o resucitan las muertas. Un argumento con vuelta de tuerca, por aquello de los consejos de la amiga.

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Son importantes, Fackel, nos aportan los nutrientes que ambos necesitamos. Sí, Sara se preocupa.

      Borrar
  11. Es muy difícil comprender qué pasa por la cabeza de otro, pero si te acercas al precipicio aunque solo sea para mirar y sin intención de saltar, (ya has dicho que no contemplas aceptar su vuelta) corres el riesgo de caer. Aunque los recuerdos sean malos aunque no tengas intención darle crédito a sus propuestas, acercarte de cualquier manera a él puede despertar ilusiones olvidadas, no en vano no todo sería malo a su lado todo el tiempo. Haz caso a Sara "eres más que eso" (¿Se casa Sara?, che qué decepción me ha dado y qué alegría para ella y por ella, espero que sea feliz, debería esperar con todo a que la bebe de Marcela tenga edad de llevarle las alianzas, sería un hermoso detalle) un saludo desde la ciudad de la Luz.

    ResponderBorrar
    Respuestas
    1. Con Manolo casi todos son buenos recuerdos, hasta el final que se estropeó, con aquel sí fue complicado.
      Y lo de Sara, veremos cómo se sucede. Deberías esperar cincuenta años para decidirse, Joaquín

      Borrar

Susúrrame al oído, que mi corazón te escucha