Lo vi venir y sabía que no podría evitarlo; y claramente no lo esquivaría. Fue demasiado tarde para cambiar de lugar sin que pareciera que estaba huyendo; y decidida, lo afronté con suavidad. Se acercó cauteloso, sin dejar de mirarme con su profundidad acostumbrada -ahora más honda-, quizás intentando derretir el iceberg que desde hace tiempo habita en mí. Esperé pacientemente a que llegara, me sentía clavada a la silla y con mi mundo detenido, callada; y ausente en el horizonte de sus ojos. Nos encontramos como en una cita no acordada y hablamos superficialmente, como si fuéramos dos extraños íntimos.
Siempre que Manolo está cerca me queda su aroma dentro; y nuevamente se reafirma mi decisión de mantenerlo lejos porque, a menor distancia... mayor obstáculo para olvidar.
Tal vez hay una búsqueda, ¿cómo llamarla?, interactiva, pero reprimida o contenida, en uno más que en otro, pero ella es sabia: con distancia corta es tan difícil olvidar...(¿Se quiere olvidar o solo es indecisión?)
ResponderBorrarEs una decisión tomada y no hay retorno, Fackel, pero tampoco se trata de presionar la cicatriz -suele quedar sensible al tacto-.
BorrarSi no está cerrada.
BorrarNo, solo es la sensación de que ahí hubo algo.
BorrarMe gusta tu expresión "lo afronté con suavidad" sobre todo cuando no deseas encontrate con alguien, ese saber recomponerte con serenidad para esperar su acercamiento, supone mucho autocontrol. Sí, yo tb pienso que si deseas olvidar a alguien, mejor mantenerte alejada de él.
ResponderBorrarSeguro que lo haces de maravilla!
Un beso MAIA!
Hay personas que, su forma de pasar página es gritando y enfadándose, si eso les funciona, bien por ellas, lo mío es mantener el control de mis actos básicamente, somos adultos y no estamos aquí para pasarlo mal. Otro para ti.
BorrarSiempre me ha admirado esa fuerza para resistir un impulso así, algo que aún duele o por lo menos sigue importando. Esos asuntos solo los he resuelto con distancia. Sucumbo a la cercanía.
ResponderBorrarPasa que si sucumbes, Sergio, te queda un mal momento y esa sensación la siento peor que mantenerme firme. Puedo mantener la cercanía pero, ¿Por qué lo pasaría mal?
BorrarHay que ser muy fuerte para no sucumbir.
ResponderBorrarBesos.
Mantener el temple, TORO. Otro para ti.
Borrarél apela al transcurrir del tiempo, donde el dolor pasa y el olvido (casi) se hace presente.
ResponderBorrarque tengas un feliz día.
Él cree jugar con ventaja porque soy amable. Si algo me conoció, sabe que hay una barrera irrompible en medio de ambos. Feliz día.
BorrarManolo, Manolo, parece ser tu criptonita, aún en esa dicotomía de dos extraños íntimos.
ResponderBorrarBesos dulces Maia y dulce noche.
Es parte de mi pasado. Otro para ti.
BorrarCuanto te comprendo, Maia.
ResponderBorrarValor y ánimo, tenemos que seguir resistiendo a un mundo que no hay quien lo entienda y, a veces, quien lo soporte, no obstante, sigamos, lo mejor está por llegar.
Un abrazo.
No espero nada, Enrique pero lo que llegue, no dudes que se le recibirá con agrado. Un abrazo
BorrarTal vez no sea necesario el olvido sino que ciertas emociones se vayan esfumando. Y esos encuentros casuales no sean íncomodos.
ResponderBorrarBesos.