Buscaba algunos productos para la reunión del fin de semana, me sentía perdida entre tantos cárnicos y opté por enfocarme en algunos quesillos, nueces, arándanos y quizás jamón serrano, algo podríamos hacer con eso, -pensé- estaba concentrada en qué escoger cuando sentí un aliento recorrerme desde atrás.
— ¡Manolo!
— Maia, mi amiga, ¿cómo has estado?
— Abrumada en este momento, intento organizar las compras para la cena de esta noche con las chicas, pero tanta carne... es demasiado para mí; y el olor en casa penetra y se queda por mucho
— ¿Y si encontramos un punto medio, Maia?
— ¿Qué sería?
— Quizás les parecería drástica una cena vegana, pero podríamos pensar en una vegetariana
— ¿Vegetariana?, podría funcionar; ya seleccioné algunos quesillos, obvio, el jamón serrano no entra en el matiz pero, ese podría ser el punto de distracción para evitar reclamos, es una buena solución, Manolo
— ¡Bien!, ¿sabes dónde puedo encontrar esto, Maia?
Abrió su WhatsApp y dentro de una conversación seleccionó una imagen que antepuso y me mostró, le indiqué que tenía que salir e ir hacía la izquierda, dar vuelta, avanzar y... lo sentí perdido
— Ven, vamos a pagar esto y te muestro el camino
— Pero mujer, esto es un reburujo, me siento perdido con tanta vuelta
— ¿Y qué esperabas?, no puedes buscar compresas en el área de alimentos, muéstrame otra vez la imagen, -examiné los detalles y busqué entre tantas mientras tenía a, Manolo detrás haciendo una indicación sin darse cuenta que había elevado la voz-
— Maia, que sea flujo abundante, Maia, asegúrate que diga flujo abundante, Maia, por favor, flujo abundante
— Manolo, si intentas avergonzarme tendrás que esforzarte más porque con eso no sucederá
— ¿Avergonzarte?, no, Maia, es que, Marce me indicó encarecidamente que fuera flujo abundante
— ¿Un paquete o dos?
— Uno, por favor; y disculpa si mi comportamiento fue inapropiado
Sonreí, le entregué el paquete, lo cogí del brazo y nos dirigimos al área de autocobro, él seguía cotejando paquete con imagen
— Maia, pero aquí dice ocho piezas y el que me diste es de dieciocho
— Está bien, Manolo, nunca sobran
A última hora las chicas decidieron encargar un par de tartaletas saladas, una de atún y la otra vegana que resultó en desastre. La base al tacto se desmoronaba y el relleno era acuoso, salado y desagradable.
— ¿Saqueamos tu despensa, Maia?
— Revisen lo que quieran, Sarita, o podemos hacer algo con lo que compré está tarde
— ¡Lo hacemos!; ya sé cocinar, Maia, pero solo tú y yo, a ellas déjalas que se pongan al día -así no estorban-
— Ja, como desees, Sarita; -y mientras preparabamos todo-
— Con mi Vega acordamos vivir juntos, primero acepté, luego lo rechacé, sí, lo hice, no me mires así, Maia. El veganismo está bien un par de días de vez, -muy de vez en cuando-, pero no siempre, después de rechazarlo le dije por qué lo hacía y me dijo que si era ese el motivo que ya sabía que no soy vegana, que eso se huele, ¿cómo que se huele?, pues eso, amiga, que nos daremos la oportunidad.
— ¡Enhorabuena, Sarita!; ¿y está nueva faceta de cocinar?
— Pues verás, los fines de semana en su casa me hicieron darme cuenta que la comida no se prepara sola ni aparece por arte de magia, es ahí cuando entendí que si quieres comer debes preparar; y si pretendes preparar algo medianamente decente debes aprender.
En el jardín la música había cesado y los murmullos eran interminables; las distintas voces se atropellaban para hablar, Sarita y yo salimos a ver qué estaba ocurriendo o si había algún tipo de desacuerdo, al llegar de inmediato, Milli tomó la palabra actualizandonos con la información.
— ¿Ustedes sabían que facebook se puso nuevamente de moda?
— Mmm
— ¿Maia?
— ¿Tú madre, Milli?
— Y la de todas, se abrieron una cuenta, ¿lo sabías?
— Sé un poco del tema
— ¿Y no nos contaste?, ¿Cómo te enteraste?
— Milli, tu madre me envió un mensaje hace unos meses "Por si no sabías estoy en facebook; y es la leche", obvio ya lo sabía, me había saltado una sugerencia -de todas- casi de inmediato, me pidieron ayudar en la configuración y es cuando salimos al café. Lo que no entiendo es que no tuvieran redes antes
Después del drama por sentirse traicionadas, decepcionadas y hacerme un recordatorio de lo que significa la amistad empezaron las hazañas descubiertas.
— Mi madre resultó internacional, dice tener amigos por doquier, ahora siempre que la veo con el móvil me hago todo un drama mental de lo que pudiera sucederle
— La mía encontró a su -primer amor- y se han puesto de acuerdo para reencontrarse, he tenido que imponer tiempo en internet; y aún así se oculta para hablar con él, está desatada, es imposible controlarla, le he prohibido que hable con él pero no hay manera
—Mi madre conoció a un coreano y quiere viajar para estar con él, le dije que por nada del mundo lo permitiría y me dijo que no espera mi permiso
— Pues mi madre resultó ser pelín cuerda y se hizo de una amiga con la que pasa horas charlando, le ha vuelto la alegría por las pequeñas cosas y está muy animada con su amiga, Lupe; y hasta planes tiene de ir a visitarla y pasar una temporada juntas
Y cómo le explico que, Lupe o Guadalupe es nombre unisex...
¡Acompáñame!
Té, Café y poco más en la mesita de arrimo; y pasemos estas fechas en agradable compañía.